El escritor Ben Mezrich cuenta como los tímidos estudiantes de Harvard, Mark Zuckerberg y Eduardo Saverin, se refugiaron en sus computadoras para conseguir algo que no tenían en el campus: una vida social emocionante. Una noche del 2003 Zuckerberg tuvo acceso a las fotos de las estudiantes y propuso en una página de Internet que había creado poner puntaje a las chicas más atractivas. Ese fue el comienzo de Facebook. Luego llegarían inversiones, conflictos y traiciones. Pero sobre todo mucha innovación.