Si Walt Disney hubiera hecho caso a lo que le decían y se hubiera tomado a pecho sus fracasos, pues hoy ni existiría Micky Mouse ni toda la colección de películas Disney que a todos nos han alegrado la infancia (y lo que no es la infancia). A Walt Disney le echaron del periódico en el que trabajaba por “falta de imaginación e ideas”. ¿Te imaginas que se lo llega a creer? Menuda pérdida para él y para el mundo.
Pero no te creas que todo terminó allí, que le dijeron que no servía ni para fregar y que montó su famosa empresa y se forró. No, no, ni mucho menos. Se puso por su cuenta y montó varios negocios que llevó al fracaso uno detrás de otro.. hasta que la clavó con Walt Disney como lo conocemos hoy. Así que, hazme un favor, no te rindas nunca y sigue creyendo en ti por difíciles que sean las circunstancias. Si perseveras y crees en ti mismo, la vida antes o después te responderá.